Bales medievales en la plaza de Salas. Foto Azúa.Los mercaderes, con productos típicos y ataviados a la vieja usanza, han ocupado el centro de la población en una muestra variada y asentada que transforma anualmente Salas, y traslada a la población a unos siglos atrás.
Centenares de personas han pasado por el Mercado Medieval de Salas de los Infantes, que durante este fin de semana ha permanecido en el centro de la población burgalesa.
En esta nueva edición, más de treinta puestos dedicados a la artesanía, la gastronomía y a los oficios tradicionales se han dado cita en la Plaza Mayor durante todo el fin de semana.
Durante dos días se han desarrollado talleres infantiles, espectáculos de malabares y numerosas actividades que, además de llevar a Salas a otros tiempos, han mantenido viva la tradición de los mercaderes.
Los desfiles, la Danza de las Espadas, diversos bailes medievales a cargo del grupo local de danzas Doña Sancha, espectáculos de malabares y de los relatos del ‘Cantar del Ciego’ la leyenda de los Siete Infantes de Lara y el traslado del arcón de las cabezas de los Siete Infantes de Lara hasta la iglesia de Santa María han sido algunos de los atractivos del mercado coordinado por el Ayuntamiento de Salas de los Infantes.
