
En un comunicado redactado por lo presentes en la reunión se indica que "en los últimos días la situación se complica por momentos entre los ayuntamientos citados y ADIF ya que los trabajos de desmontaje se están realizando sin autorización alguna municipal por parte de la empresa adjudicataria, lo que llevó a sobreponer a la denuncia por la vía penal que fue presentada el miércoles por delitos contra el patrimonio, la ordenación del territorio y el medio ambiente otra por destrucción de caminos vecinales con el paso de maquinaria y camiones de gran tonelaje que los está destrozando"
Con los ánimos caldeados, los asistentes se mostraron muy dolidos por el nulo respaldo institucional recibido desde la Diputación de Burgos y la Junta de Castilla y León en la defensa de una vía férrea considerada fundamental para el futuro de ambas provincias y que se está levantando para ser reutilizada en algunos casos en las obras de alta velocidad de otras partes de España.
Tras varios meses de pelea de los ayuntamientos con las instituciones, el posicionamiento de los munícipes fue muy crítico con los políticos provinciales y nacionales que hasta la fecha no han sido capaces de dar respuesta a la población afectada. Por parte del público se llegó a pedir la dimisión colectiva de todos los representantes municipales como medida de protesta ante la destrucción de un patrimonio ferroviario histórico y se propusieron alternativas de movilización ciudadana si se comienza a desmontar el único tramo que queda íntegro entre Salas de los Infantes y Cabezón de la Sierra y que fue el primero de la línea inaugurado por Primo de Rivera en 1927.
Así, colectivos vecinales recogieron la propuesta de establecer una red de respuesta inmediata si se toca un solo tornillo de este tramo que da soporte al proyecto en el que desde hace doce años se viene trabajando desde los ayuntamientos y la Asociación para la Recuperación del Patrimonio Ferroviario, cuyo presidente, que asistió también al acto, explicó con detalle.
Ya se ha retirado el trazado de vía en el término de Cabrejas del Pinar y se ha entrado en la zona de Pinar Grande, para luego cruzar Navaleno, San Leonardo de Yagüe, Hontoria del Pinar, Rabanera del Pinar y alcanzar Cabezón de la Sierra.
Con este panorama de crispación, se está a la espera de que el Ayuntamiento de Salas reciba en los próximos días noticias positivas de la subdelegación del Gobierno. Si ello no fuera así, el conflicto ante otra sordera institucional por la destrucción del medio rural está cantado. La petición de preservar 13 kms del antiguo Santander-Mediterráneo lleva esperando respuesta desde el ministerio más dos meses. Mientras los trabajos de desguace de la línea avanzan, crece la indignación y a la vía judicial ya iniciada no tardarán en sumarse, de no mediar acuerdo, los actos de protesta vecinales.