M. A. DELACRUZ / Lerma
La Comisión de Seguimiento de las obras de Castrovido mantuvo una reunión ayer en Lerma en la que se acordó instar a las instituciones a que se agilice la puesta en marcha de las obras, las cuales, después del luctuoso accidente en el que perecieron cinco obreros, llevan paradas un año y medio.
El motivo que da la administración, de la baja laboral de la titular del juzgado de Salas de los Infantes, la sobrecarga de trabajo que tiene el juzgado de Lerma, no es razón, según dice Dositeo Martín, presidente de la plataforma, para que «se tarde tanto en realizar unas diligencias y así poder concluir las obras». Martín aseguró que, que de haber estado terminada la presa, «los daños de la avenida no hubieran sido tan cuantiosos».
Estos daños por las últimas inundaciones fueron valorados por la Comisión en 30 millones de euros. A los perjuicios en cosechas hay que sumar el deterioro que han sufrido las tierras de labor por el arrastre de tierras, además de los numerosos caminos rurales que demandan reparación urgente.
La Comisión informó de que el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, José Valín, se comprometió a realizar una visita a la zona, previsiblemente la semana que viene, para poder hacer una valoración in situ del «desastre de las inundaciones». También aprovecharán dicha visita para transmitirle su preocupación por la paralización de la presa de Castrovido.